No, no se crean que estoy en Cannes, qué más diera yo. La que está en Cannes es la película "Thirst" (Sed) del director coreano Park Chan Wook. Según los periodistas que ya la vieron, se trata de un cura católico que, por buena onda, acepta tomar parte en un experimento en el que le inyectan un virus. Quesi ese virus lo convierte en un vampiro sediento de sangre y sexo. Por cierto, cualquier parecido con personajes reales es pura casualidad. Religiosos que le "chupan la sangre" a la gente y que andan por allí satisfaciendo deseos, ¿dónde se ha visto algo así? ;-)
No encontré un trailer con subtítulos, pero creo que no son tan necesarios.
Por cierto, eso me hace recordar "la dolorosa leyenda del séptimo hijo varón de un pastor protestante que en las noches de luna llena se convertía... al budismo." (Les Luthiers, "La bella y graciosa moza") ;-)
En fin, volvamos al director. Park Chan Wook es conocido por su "trilogía de la venganza": "Sympathy for Mr. Vengeance", "Oldboy" y "Lady Vengeance". Todas muy violentas. Una vez le preguntaron que por qué el cine asiático tenía un nivel más alto de tolerancia en cuanto a escenas de violencia extrema y él respondió que a él le impactaba más las masacres que presentaban en el cine occidental. Y en parte tiene razón, nos impresiona más la violencia individual (con nombre y apellido - y ¿video?) que la violencia sin rostro, aunque cualquier tipo de violencia sea condenable. Sin embargo, para mí este tipo de sadismo extremo, como el de "la trilogía", no es necesario ni verlo ni producirlo, aunque sea presentado de forma estética. Claro, es mi opinión personal. Por eso yo preferí ver Park Chan Wook "light": I'm a Cyborg and that's ok (Soy un cyborg y eso está bien). Esta película es muy bonita. A pesar de que no está completamente libre de violencia, está estéticamente muy bien lograda y tiene un toque surrealista - poético que me gustó mucho. Aquí el trailer.
Dijo un crítico que si la "trilogía de la venganza" era el plato principal, "I'm a Cyborg and that's ok" es el postre y "Thirst" es la cuenta. Pues yo soy muy dulcera y me quedo con el postre, y cuando estrenen "Thirst" ya pensaré si pido la cuenta o me voy sin pagar.
Si no fuera por lo del vampiro hubiese pensado que era una bio pic de Cash Luna, en fin.
ResponderEliminarBueno, Park Chan-Wook es uno de mis directores favoritos en cuanto a su estilo. Sobre la brutalidad de sus películas tal vez si presentaría una opinión diferente, no exalto la violencia ni lo atroz que es pero como decía Hannah Arendt tampoco podemos negar su existencia. Siempre me ha fascinado esa capacidad del ser humano de "crear los sueños más bellos y las pesadillas más horribles".
Lo que me gusta mucho del director y del cine coreano en general es la limpieza de las tomas y ese toque entre fantasía y realidad que le dan a sus peliculas, superan con creces al cine japonés en cuanto a fotografía.
No comentaré la trilogía, pero te agradezco la info. sobre "sed" y la del "Cyborg", les hecharemos un ojo.
Abrazo
Cabal, yo también pensé en Cash. ;-)
ResponderEliminarEn cuanto a la violencia en Park Chan-Wook, buena onda que tengas una opinión diferente, porque me haces analizar más sobre lo que pienso.
En mí también ejerce una especie de fascinación "el lado oscuro" del ser humano y creo que está bien que sea parte del arte. Por otra parte, creo que también necesitamos límites, porque si no cada vez nos volvemos más insensibles al dolor humano. Como lo que sucedió con el caso de la esposa del procurador o el "castigo" que proporcionó el hermano del emir de Abu Darbi a un comerciante. Muy pocas personas se escandalizaron por semejante violencia. No será que los medios ayudan a que las personas cada vez se vuelven menos empáticas cuando se trata de violencia de este tipo? Aunque pensándolo bien, acaso tenga más culpa James Bond que Lady Vengance. ;-)
En cuanto al cine coreano debo confesar que no conozco mucho. Pero tengo en lista de pendientes "Primavera, verano, otoño, invierno... y primavera" y "Bin-jip" de Kim Ki-duk (otra vez los postres ;->)
Mil gracias por tu comentario.