Debo confesar que me costó un poco decidirme a comprar el DVD de "Aquí me quedo". Primero, porque el trailer no prometía mucho y, segundo, porque no me podía imaginar cómo se podía hacer una comedia a partir de un hecho tan terrible como un secuestro. Me refiero, por supuesto, a un secuestro en el contexto guatemalteco. Sin embargo ayer la vi y les digo que valió la pena. La película me gustó mucho. Me sorprendió encontrar tantos aspectos interesantes en la película, habiendo leído reseñas que decían que en esta película solo debía esperarse humor y nada más. A decir verdad, no sé si todo lo que vi en la película sea lo que el autor quería expresar, o si estoy interpretando de más o de menos, pero ustedes véanla y me dirán si ven lo mismo que yo. Para mientras, yo les enumero cortamente lo que me gustó.
- lo que más me gustó fue la protagonista. No, no me refiero a la esposa, que tiene un papel menor, sino por supuesto a Xela (la ciudad de Quetzanltenango) que es la verdadera protagonista. Es siempre muy interesante cómo un director presenta una ciudad, qué partes le parecen características, interesantes, qué le dicen algo. La fotografía, por cierto, está muy bien realizada.
- otra cosa que me gustó, es lo que decía, la forma en que el director logra hacer una pieza cómica de una situación tan terrible como un secuestro y que una persona esté constantemente amenazada de muerte. Un poco al estilo del "síndrome de Estocolmo", en el que la víctima se identifica con el victimario, en esta película el secuestrador y el secuestrado, ambos en situaciones difíciles en la vida personal, se acercan durante esta situación excepcional, y esto hace que sean posibles las situaciones cómicas y que ambos protagonistas resulten simpáticos para el espectador
- si bien la estructura de la película es lineal (con algunos flashbacks) no tiene la estructura común de una parábola (para arriba o para abajo) sino de una curva senoidal, con varios puntos culminantes, que luego bajan y vuelven a subir, de tal forma que las interrogantes que tenemos desde el principio - por qué Willie quiere matar a Claudio/Paco, por qué no lo mata desde el principio y qué problemas tienen ambos - son solucionadas, no de un solo, sino poco a poco a través de toda la película.
- "mejor bailemos", le dice Claudio/Paco a Willie, "en lugar de estar amenazando, mejor bailemos" es una frase que define la relación entre la protagonista y los protagonistas. Quetzaltenango, una ciudad llena de cultura, es testigo de ese acto de violencia que es el rapto. El arte como antagonista y como cómplice de la violencia (véase Zizek - The Pervert's Guide to Cinema). Por una parte, el arte, la cultura, el baile como expresión y acercamiento, y por otra parte, el arte que puede ser violento, el arte que puede ser cómplice, como cuando la niña sigue tocando sin ayudar a Claudio/Paco y la música sirve de soundtrack a la persecución. La propuesta "mejor bailemos" es, si lo vemos desapasionadamente, o mejor dicho, apasionadamente, algo muy profundo.
- el final es genial. Como sucedió con Casablanca, el final de la película no estaba fijo desde el principio sino que se fue dando conforme iban rodándola y no fue sino hasta casi terminada la película que se decidieron por ese final. Esto es una ventaja, ya que es inesperado y, al estilo de Six Sense, obliga a una nueva lectura de la película. Base para esta relectura de la película es, para mí, cuando Willie cuenta sobre la obra de teatro en que participó. Que se trataba de un niño que, ante la muerte inminente, decide vivir todo lo que no había vivido, visitar lo que no había visitado. Por eso les recomiendo que al final se hagan estas preguntas: ¿quién es el niño/persona que va a morir?, ¿a quién se le está dando la oportunidad de ver lo que no vio, es decir, esta vista de Xela? ¿A quién se le permite experimentar lo que nos está mostrando Willie? Hay allí una intersección entre los personajes, el espectador y el director, como guía y guiado, como amenazador y amenazado.
- finalmente, el humor, que es el fin último del director y que es logrado muy bien a través de la contraposición de tensión con frases inesperadas y chistosas.
¿Las cosas que no me gustaron de la película? Algunos chistes que no me parecieron divertidos, como todo lo que dice Willie durante la confesión ante la iglesia. El inicio con esa voz tan estridente de la esposa, que me parece que no era necesaria, principalmente porque no va con lo que se dice después del carácter de la tal Cusi. Otra cosa que falla a veces es la dicción y el sonido.
Pero en general es una película que vale la pena ver. Divertida, agradable de ver. Y les diré que hoy vi "Prohibido robar rosas", un cortometraje de este director, y realmente el salto entre ese cortometraje y "Aquí me quedo" es bastante grande. Principalmente porque los personajes son mucho más simpáticos y la historia mucho más elaborada. Felicitaciones entonces a todos los que participaron en esta película.
Les dejo aquí una entrevista con el director.
Para finalizar, ahora sí, creo que con esto que dice el director (véase entrevista) que lo que quiere es hacernos reír, que nos dice "mejor bailemos", nos quiere decir algo como lo que dice Julio Serrano en uno de sus textos:
"Cuándo fue la última vez que a usted, señorita, señor, dama o caballero, se le pusieron a brincar los pies de puro gozo porque en lo más torcido, en lo mas maliado, en el trecho mas pisado del dia, el baile fue la opción vengadora de hacerle sho al dolor, de hacerle silencio a la pena cotidiana.
¡Que en este pedazo de suelo hirviente no solo de dolor brincan las patas!"
El baile, el cine, el arte, como liberadora venganza contra los males de la vida.
Bailemos.
PD. Una reseña interesante de Aída Toledo en El Diario de Centroamérica.
PD2. A partir del 10 de mayo, todos los martes de mayo del 2011 se presentará la película en la Universidad Popular (10a. Calle 10-32 zona 1)
La película original puede comprarse en Guatemala en Sophos y con el Buki, en El Amate
Yo no soy experto en cine, apenas un espectador, talvez por eso no pude apreciar esta película. Por el contrario, "Prohibido cortar rosas" sí que me pareció muy buena y divertida. Sobre todo la escena donde Valdés Pedroni manda al chico a "limpiarse" con su propia poesía. Tal vez porque ya había visto ese cortometraje esperaba mas de este película. Y no un abuso de lo que me parece "chiste fácil". Esa escena de la iglesia incomentable. Pero ya dije, no soy experto en cine.
ResponderEliminarTienes razón Engler, en cuanto a humor es cosa de gustos. Hay muchos tipos distintos de humor y no siempre se da con el que gusta a todos. A mí me gustó más el humor de "Aquí me quedo" y a ti más el de "Prohibido cortar rosas". Es posible que a mí me haya pasado lo contrario de a ti, que vi primero "Aquí me quedo" y cuando vi "Prohibido cortar rosas" me pareció todo como ya visto, ya que tienen muchos paralelos.
ResponderEliminarMil gracias por tu comentario.
Muy completa reseña, Ixmucané. Yo tuve la oportunidad de participar en un corto de Rodolfo hace muchos años, y su proceso creativo es bastante enriquecedor. Aquí me quedo es una película nada pretenciosa y muy bien hecha. Saludazos!
ResponderEliminarTampoco soy experto en cine. Un observador nada más. Como dice la escuela de Palo Alto, el mensaje al final lo termina haciendo el receptor, no el emisor y eso es lo rico y lo divertido, pues cada uno ve desde sus ojos. Eso parece obvio pero no lo es. A mi me gustò la fotografía, el sonido y el manejo de càmara. Quizás porque acababa de ver Puro Mula en donde estos elementos son bastante deficientes. De la historia y los personajes hay mucho que decir, aunque por momentos me parecieron un pretexto para hacer un paseo turístico por Xela -y eso fue precisamente lo que no me gustó-. Quizás esto se deba a que los personajes al final del día tiene una estructura un tanto floja. Me llama la atención que quizás, sin darse cuenta -o muy intencionadamente-, se presenta una situación que ahora nos toca vivir a diario: tener una pistola permanentemente apuntàndonos a la cabeza y lo peor, lo peor de todo es que lo hemos naturalizado y pensamos, como el protagonista: no pasará nada. Y es cierto, de repente uno se topa en la calle a un energúmeno que le echa encima el carro porque no pudo pasar cuando quería, o la clásica moto tocando el vidrio con un arma amenazante o está uno en un multirestaurante y pasa el botudo con la 45 en la cintura viendo con cara de perdonavidas, esto sólo para mencionar lo más obvio. A veces es complejo tratar de entender lo que el que hizo la película quizo decir. Sería un bonito ejercicio que nos juntàramos los que la vimos a ver que vimos, pues como diría mi inefable profesor de cine Jon Dunn: yo le proyectaré esta película, cuyo tema es xx, que mirará usted no se. Y esa es la magia.
ResponderEliminarTienes razón. Cada uno hace una lectura distinta de las películas según sus conocimientos y experiencias. Me gustó mucho esa comparación que haces con la situación de violencia en Guatemala, que se siente como si te pusieran todo el tiempo una pistola en la cabeza.
ResponderEliminarY, aún así, los guatemaltecos son capaces de muchas hazañas culturales, como esta. Es para quitarse el sombrero.
Muchos saludos y gracias por tu comentario.