Otro sádico esteta es el director danés Lars von Trier ("Bailando en la oscuridad", "Dogville", "Manderlay", "Breaking the Waves"), quien presentó en Cannes su película "El Anticristo" (The Antichrist). Dicen que la gente salió de la película en estado de shock, sin poder creer lo que habían visto. Imagínense. Lo que me reconforta de esto es saber que aún hay límites, en cuanto a violencia, y que escandaliza el que los transpasa. En este mundo en el que se hacen películas "splatter" (My Blood Valentine) en 3D, es bueno saber que no todo se puede soportar. La cuestión, por otra parte, es que, habiendo llegado a un límite, otros tratarán nuevamente de traspasarlo.
Pero volvamos al Anticristo. La película trata de una pareja que pierde a su bebé. Ella, plagada de sentido de culpa, se deja convencer por el esposo, sicólogo, para ir a un lugar llamado "Edén", que más que paraíso resulta siendo un infierno para los protagonistas, donde él quiere someterla a una terapia muy personal. Allí, solos rodeados de una naturaleza amenazante, las situación se sale de control.
Aquí el trailer (otra vez sin subtítulos)
Lars von Trier dice: "creo que que la maldad es parte de la naturaleza, la naturaleza que nos rodea y la naturaleza interior".
Cito aquí también al crítico Hanns-Georg Rodek porque tiene un aporte interesante: "La maldad está en la naturaleza, eso dicen algunas teorías antiguas, ya que la cercanía al estado natural hace que los seres humanos dejen de serlo y se olviden de la cultura que les transmite la civilización. Por eso el bosque es el lugar en el que la sexualidad se libera con más intensidad, y von Trier relaciona esta liberación con un miedo visceral masculino a la fuerza de la sexualidad feminina, un miedo que ha tenido su expresión más extrema en la cacería de brujas".
Aparte de esta idea de la naturaleza vrs. civilización, me parece interesante la participación de Willem Dafoe como "Mr Nature", o sea el anticristo en un sentido metafórico, habiendo actuado como Jesucristo en "La última tentación de Cristo" de Martin Scorsese, y de dios padre justiciero (también metafórico) en Dogville y Manderley. Eso me hizo recordar la entrevista de Jesús Miranda (Creciendo en Gracia) en la película Religulous, cuando Miranda dice, "si yo hubiera descubierto que era el diablo personificado [en lugar del mesías] también hubiera hecho un buen trabajo" a lo que Maher responde:"es que lo importante es la forma en que trabajas; al final del día, seas mesías o satanás, lo importante es que lo hagas con amor y que te esfuerces el cien por ciento". ;-)
Yo, por mi parte, les recomiendo ver las otras películas de Trier, principalmente "Bailando en la oscuridad", "Dogville" y "Breaking the Waves".